El PRI llegará a la justa electoral de 2024 prácticamente cayéndose a pedazos, todo indica que Alejandro Moreno será el último arquitecto de una extinción anunciada, la desbandada de conocidos personajes de ese partido revela lo inminente, serán pocos y esos pocos no serán priistas, quienes decidirán sobre el frente Va Por México para la sucesión presidencial.
Durante el registro de aspirantes opositores hubo ingredientes especiales, desde una inusualmente feliz Xóchitl Gálvez, pasando por un impresentable Gabriel Quadri otro panista como Jorge Luis Preciado recordado únicamente por su fallida iniciativa para armar a la ciudadanía y concluyendo con un melodramático Santiago Creel.
Se pueden agregar o salir otros y no importará, porque serán únicamente comparsa, la moneda al aire solo tiene dos caras, Gálvez o Creel.
Ese frente opositor ha tomado una riesgosa estrategia, diseñar a una candidata con similitudes étnicas a esos sectores que no suelen simpatizar con la derecha, Xóchitl Gálvez se lanza a la aventura con una bandera nueva, un origen que nadie discute pero que fue olvidado por ella misma desde hace muchos años; basta recordarla muda cuando su ex jefe Vicente Fox permitió todo tipo de atropellos contra los campesinos de San Salvador Atenco, donde tres mil quinientos efectivos policiacos atacaron a los pobladores en uno de los hechos represivos más brutales de los que se tenga memoria, en aquel lejano 2006, la ahora aspirante permaneció invisible y callada.
En la precampaña más larga de nuestra historia, la ventaja la lleva Xóchitl sobre Creel, la estrategia parece buena pero arriesgada, la Senadora con licencia niega apasionadamente ser de derecha y eso podría causar el enojo de la militancia panista.
Por lo pronto la batalla parece ser únicamente contra el sempiterno candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador.
(Video) La precampaña más larga de la historia
La opinión de Michelle Onofre sobre la oposición en las elecciones 2024.
