El conflicto que inició el pasado 6 de noviembre, en los municipios de Teloloapan, Cuetzala y Apaxtla de Castrejón, ante la irrupción de un grupo armado en la zona, ha dejado como saldo familias desplazadas, bloqueos carreteros, cierre de negocios y de escuelas en la Región Norte del Estado.
El 16 de diciembre se cumplieron 40 días de la violenta de un grupo de civiles armados en las comunidades de Cuaxilotla, el Mirador, Tlacaquipa y Tepoxtepec, que cobró la vida de Frosino Jaimes y Gonzalo Jaimes (Padre e hijo) y Wilibaldo Reyna.
Por lo que, en el parapeto de piedra en el que murieron Frosino y Gonzalo, sus compañeros de la Policía Comunitaria de la Tecampanera colocaron una ofrenda floral y dos vasos con refresco y mezcal, en honor a sus difuntos, mientras que en la comunidad del Mirador, la familia de Wilibaldo Reyna realizó un rezo tras los primeros 40 días de su partida.
Los tres formaban parte de la Policía Comunitaria Tecampanera, que surgió el pasado y 7 de mayo del 2017 en el municipio de Teloloapan, y que, durante tres días, mantuvo cerrado el acceso carreteros, para exigir al Gobierno Estatal y Federal el refuerzo de la seguridad en la zona tras la irrupción del 6 de noviembre y la muerte de sus compañeros.
Por lo que, desde la mañana del 16 de diciembre, se permitió el paso a los vehículos al municipio, además de que las actividades comerciales, transporte y escolares se reiniciaron de manera parcial luego del cierre y suspensión de los mismos por temor de los pobladores a otro ataque armado.
En comunidades como Cuaxilotla, del municipio de Apaxtla, donde, sumado a los dos homicidios, fueron quemadas dos camionetas, los pobladores abandonaron sus hogares y se refugiaron en la cabecera municipal de Telolopan, dejando la escuela, la iglesia y sus hogares vacíos, además de sus animales que vagan por las calles de la comunidad.
