La violencia en Culiacán ha golpeado a todos los sectores poblacionales, comerciales y seres vivos. Ha llegado tan lejos que Ernesto Zazueta, presidente del Santuario Ostok, ha tomado la decisión de migrar por el bienestar de los animales.
Zazueta asegura que hay días que, por las balaceras, ni él ni su equipo logran llegar al inmueble para darles de comer a los animales. Explica que han sido víctimas de robo también y que no hay condiciones para proteger la vida de las especies que resguardan.
700 ejemplares de vida silvestre, entre tigres, leones, jaguares, antílopes, primates y aves, viajan ya por la Autopista Culiacán-Mazatlán de 217 kilómetros, custodiados por elementos de la Guardia Nacional y un helicóptero, hacia su nuevo hogar dentro del Bioparc El Encanto, a las afueras del Puerto de Mazatlán.
En esta nueva ubicación, Ostok contará con la colaboración del “Encantador de Perros”, César Millán, quien ahora podría más bien llamarse “Encantador de Elefantes”.
Tristemente, no son condiciones relacionadas con la naturaleza las que alejan a los animales de este espacio; además, el santuario, el director del mismo y sus familiares han recibido amenazas, motivo que influyó en la decisión de trasladarse.