Los campos de fútbol de la colonia Antonio Barona en Cuernavaca, Morelos, fueron escenario de una tragedia que ha conmocionado a la comunidad. Leonardo Gómez Garduño, un joven futbolista de 16 años, perdió la vida tras ser alcanzado por un rayo mientras jugaba un partido.
Leonardo, conocido cariñosamente como “Leo” por sus amigos y familiares, era un apasionado del fútbol y un destacado jugador en su equipo local. El incidente ocurrió durante una tormenta eléctrica que sorprendió a los jugadores y espectadores. Según testigos, el rayo impactó directamente en el campo, hiriendo a varios jóvenes, entre ellos Leo, quien sufrió las peores consecuencias.
Tras el impacto, Leo fue trasladado de urgencia al Hospital Henri Dunant de Cuernavaca, donde recibió atención médica inmediata. Sin embargo, debido a la gravedad de sus heridas, fue necesario trasladarlo al Hospital de Ortopedia “Magdalena de las Salinas” en la Ciudad de México. A pesar de los esfuerzos de los médicos y el apoyo de su familia, Leo falleció el domingo 4 de agosto a las 12:01 del día.
La noticia de su muerte ha generado una ola de solidaridad y tristeza en la comunidad. Amigos, familiares y compañeros de equipo han expresado su dolor y han recordado a Leo como un joven lleno de vida, con un futuro prometedor en el fútbol. “Leo nos enseñó el verdadero significado del amor y la pasión por el deporte”, comentó su entrenador, Gregorio Yáñez Pineda.
Este trágico incidente también ha puesto en evidencia la necesidad de mejorar las medidas de seguridad en los campos deportivos, especialmente durante condiciones climáticas adversas. La familia de Leo ha hecho un llamado a las autoridades para que se implementen protocolos de seguridad que puedan prevenir futuras tragedias.
La pérdida de Leonardo Gómez Garduño es un recordatorio doloroso de la fragilidad de la vida y de la importancia de la seguridad en todas las actividades deportivas. Su legado vivirá en los corazones de quienes lo conocieron y en la comunidad que ahora llora su partida.
