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(Video) Jorge Gamboa se salió con la suya

La opinión de Jesús Castillo sobre el actuar de Jorge Gamboa frente al Tribunal Superior de Justicia.

opinion de jesus castillo
Foto: 24 Morelos

El pasado miércoles 7 de junio, el Pleno del Congreso del Estado aprobó por mayoría de votos y en lo general, los dictámenes correspondientes al haber de retiro de las y los magistrados que integran los tribunales Superior de Justicia (TSJ) y de Justicia Administrativa (TJA); asimismo, amplió a cuatro años el periodo de la presidencia del TSJ.

Con esto se cumple una negociación entre diputados y magistrados que adelantamos desde el año pasado: pensiones vitalicias por magistraturas.
Aunque le llamen haber de retiro, en realidad se trata de una pensión jubilatoria, a la que tendrán derecho los magistrados con las siguientes ventajas:

Que tengan antecedentes como trabajadores al servicio de los poderes del Estado o municipios, con antigüedad de quince años o más, incluyendo el tiempo del ejercicio de la magistratura para efectos del cómputo únicamente de esa antigüedad; y hayan ejercido el cargo de Magistrada o Magistrado por un lapso mínimo de 8 años. Además, esas pensiones serán hereditarias para las esposas e hijos.

Catorce magistrados estarían en posibilidades de aceptar el retiro voluntario para ceder sus espacios a los que elijan los diputados. Esas magistraturas los diputados las pueden vender, se dice que están valuadas hasta en cinco millones, o asignarlas a sus incondicionales.

Todo esto lo operó magistralmente el actual presidente del Tribunal Superior de Justicia, Jorge Gamboa Olea, quien a cambio obtuvo cuatro años de permanencia en el cargo, en lugar de los dos que legalmente le correspondían.

El Pleno del Congreso aprobó reformas a la Constitución Política del Estado para derogar el párrafo 3º del artículo 89 y reformar el artículo 94, a fin de establecer que el TSJ elegirá como titular de su presidencia a uno de sus miembros, cuyo periodo durará cuatro años sin posibilidad de volver a ocupar ese cargo.

En el articulado transitorio se determina además que, quien ocupe la presidencia al momento de entrar en vigor la reforma, durará en su cargo cuatro años contados a partir de la fecha de su designación.

Con esta negociación entre dos de los poderes del Estado, y la aparente pasividad del tercero, son muchos millones de pesos los que se estarán gastando para mantener a un buen número de ex magistrados, más aparte los sueldos de los que lleguen con la bendición de los diputados.

¿Y sabe de dónde sale todo ese dinero?

Sí, efectivamente, de lo que usted y yo pagamos de impuestos.

Hasta la próxima.

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