La reducción de la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas ha avanzado en México como parte de una reforma pensada para mejorar la calidad de vida de los trabajadores, sin embargo, todavía no está aprobada en el Congreso y no se discutirá en este periodo legislativo.
Sin ser oficial, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) ha presentado un plan para una implementación gradual desde 2026 hasta 2030. Se contempla disminuir dos horas por año: en 2026 la jornada pasaría a 46 horas, en 2027 a 44, hasta llegar a 40 en 2030. Se proponen desde semanas de cinco días con jornadas de ocho horas hasta semanas laborales reducidas de cuatro días con jornadas más intensas.
Entre los retos está la adaptación de las empresas, especialmente las pequeñas y medianas, además, se discuten aspectos como pausas activas y descansos laborales, que algunos sectores proponen considerar como tiempo efectivo trabajado.
Ahora bien, Ricardo Monreal, coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, aseguró que no es parte de la agenda legislativa de este periodo de sesiones y, aunque mencionó que "sí hay un compromiso de la presidenta de la República, de que la semana de las 40 horas pueda establecerse antes de que concluya su mandato", no se aprobará en el periodo legislativo que inició el pasado 1 de septiembre.
Monreal dijo no estar enterado de que la reforma de 40 horas se discutirá en este periodo, como afirmó Ramírez Cuéllar, vicecoordinador de Morena. Por lo que, aunque pudiera haber un malentendido, es altamente probable la aprobación de la reforma se lleve más tiempo del esperado.