En 2019, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador envió una carta al rey Felipe VI solicitando una disculpa formal por los abusos cometidos durante la Conquista, lo que generó un fuerte debate diplomático y político. Ahora, en pleno 2025, España reconoce agravios por la Conquista.
Hace 6 años, el gobierno español rechazó la petición, argumentando que no se puede juzgar el pasado con criterios actuales, y defendió que el rey no tendría que pedir perdón a ningún país. Esta negativa fue calificada como arrogante por México y generó tensión entre ambos países.
Sin embargo, ahora el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, reconoció públicamente el "dolor e injusticia" sufridos por los pueblos originarios mexicanos durante la época de la conquista española. Aunque no fue una disculpa como tal, este reconocimiento fue interpretado como un avance significativo por autoridades mexicanas, incluidas la presidenta Claudia Sheinbaum, quien celebró este gesto.
El reconocimiento de los agravios provocados a los pueblos originarios del territorio ahora denominado como "México" es considerado como un primer paso importante para sanar heridas históricas. Tuvo lugar en un contexto de diálogo cultural y de apertura, con exposiciones y eventos conjuntos entre ambos países que reflejan una relación en proceso de construcción basada en la memoria compartida.