México adquirió 47 trenes de pasajeros a la firma Alstom por 920 millones de euros (unos 20 mil millones de pesos), un hito en la modernización ferroviaria impulsado por el Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030. Pero, ¿cómo se usarán?
La compra incluye 33 trenes de larga distancia (con capacidad para 300 pasajeros y 14 suburbanos (para hasta 600 pasajeros), con 76.6% de trabajo de fabricación en Ciudad Sahagún, mantenimiento por 5 años, equipamiento de talleres y capacitación técnica para personal mexicano.
Estos trenes conectarán corredores clave: México-Querétaro-Irapuato (centro-norte) y Saltillo-Monterrey-Nuevo Laredo (frontera). La meta es reactivar servicios masivos para reducir tiempos de traslado y descongestionar autopistas.
De esta manera se impulsa el empleo local, la transferencia tecnológica y movilidad sostenible, alineándose con la reactivación ferroviaria liderada por Claudia Sheinbaum para vincular polos económicos y mejorar la calidad de vida regional.
Desde octubre 2024, Sheinbaum inició estudios para 13 tramos en 4 fases (marzo-julio 2025: AIFA-Pachuca, México-Querétaro, Querétaro-Irapuato, Saltillo-Nuevo Laredo), más los 47 trenes Alstom (920M euros) para larga distancia, sumando al Tren Maya de carga y rutas como México-Guadalajara.
El impacto del proyecto es histórico pues creará 300 rutas, beneficiará a estados como Hidalgo, Edomex y estados del norte con Sedena y empresas privadas, posicionando a México como un punto logístico rumbo al 2030.
