En México, la informalidad laboral sigue siendo uno de los grandes retos económicos y sociales, de ahí que reducir la informalidad es prioridad para fortalecer la economía nacional. Se está avanzando en la materia y la generación de empleo formal repuntó en septiembre en México.
El empleo informal, que incluye actividades sin contrato, sin prestaciones sociales, y en unidades económicas no registradas, implica una serie de desafíos tanto para los trabajadores como para el país en general. Los empleados informales carecen de acceso a seguridad social, prestaciones laborales y protección frente a situaciones como enfermedad, maternidad o desempleo.
La creación de empleos formales debe ir acompañada de políticas públicas enfocadas en la atracción de inversiones, capacitación, simplificación de trámites y fomento al emprendimiento, para ofrecer más opciones legales y seguras a la población ocupada de todas las edades.
En este contexto, de acuerdo con el reporte mensual del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en septiembre del 2025 la generación de empleo formal repuntó 28.4%, es decir, creció a 116 mil 765 plazas. Y aunque de enero a septiembre se observó un descenso significativo, se espera que la tendencia se al alza.
El IMSS también reportó que el salario base de cotización promedio alcanzó los 623.1 pesos diarios, el nivel más alto registrado para un mes de septiembre, con un alza nominal anual del 7.1%. Entre los sectores con mayor crecimiento en creación de empleo destacan transportes, comunicaciones y comercio.
Ahora bien, por entidad federativa, el Estado de México, Hidalgo y Michoacán mostraron incrementos superiores al 3% en la generación de empleo formal, impulsando el crecimiento local y contribuyendo al panorama nacional.