El pasado 3 de septiembre, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, recibió en Palacio Nacional al secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, en su primera visita oficial como parte del Gabinete de Donald Trump. Entre otros temas, acordamos la creación de un "grupo de alto nivel" contra el crimen organizado.
Durante la reunión, ambos líderes abordaron la formalización de un Programa de Cooperación sobre Seguridad Fronteriza y Aplicación de la Ley, basado en cuatro pilares: reciprocidad, respeto a la soberanía, responsabilidad compartida y confianza mutua.
Se trataría de un mecanismo bilateral diseñado para dar seguimiento y coordinar acciones concretas para combatir a los cárteles de la droga, atender flujos financieros ilícitos, y prevenir y combatir el robo de combustible.
Además, se incrementarán inspecciones, investigaciones y procesos judiciales para frenar el tráfico de drogas y armas entre ambas naciones. El objetivo central es desmantelar el crimen organizado transnacional y mejorar la seguridad regional.